Apple se ha sacado de la manga una interesante patente que nos permitiría desbloquear el Apple Watch solo con ponerlo en nuestra muñeca.
Apple Watch es posiblemente el reloj inteligente más avanzado del mercado, algo que también se atestigua a través de su precio, y donde hay una enorme comunidad de usuarios detrás que confían en una tecnología que sigue superándose año tras año.
Pues los de Cupertino quieren que los futuros Apple Watch sean mucho más inteligentes, y al mismo tiempo salvaguardando aún más nuestra seguridad ante cualquier tipo de pérdida o robo.
Y es que Apple ha presentado una patente registrada en la Oficina de Marcas y Patentes de Estados Unidos donde se incluye un sensor de luz en la parte posterior del reloj, y que servirá para autenticar a los usuarios. Esto significa, que cuando el usuario se ponga el Apple Watch en la muñeca, este sensor de luz sería capaz de identificar dicha área y memorizarla.
Así que si cuando nos quitemos el reloj y nos lo volvamos a poner, el Apple Watch sería capaz de identificar si somos nosotros el usuario principal y se desbloquearía automáticamente, sin tener que introducir ningún tipo de credencial o realizar ningún gesto. Igualmente serviría para salvaguardar nuestra privacidad y seguridad, dado que si perdemos el reloj, ninguna otra persona podría hacerlo funcionar dado que no reconocería el área de la muñeca.
Este sensor de luz memorizaría todas las áreas de la muñeca del usuario, para generar así una imagen muy detallada donde se habrían memorizado todas las venas que son únicas en cada persona, lo que vendría a ser lo mismo que una huella digital.
En todo caso, que los de Cupertino hayan registrado esta patente no significa que la vayan a incluir en un próximo Apple Watch, sino que habría que pensarlo a mayor plazo, presumiblemente para la próxima década.
Esta tecnología también podría aplicarse a otros campos o nichos de mercado, pudiendo así desbloquear, por ejemplo, nuestro ordenador portátil o incluso el teléfono móvil simplemente sosteniéndolo y reconociendo nuestra palma de la mano.
